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CONSIDERANDO LA LARGA DILACIÓN DEL PROCESO DE ELECCIÓN DE UN CONTRALOR INTERNO TITULAR (4 AÑOS), CONSEJO SUPERIOR PIDIÓ UNA SESIÓN EXTRAORDINARIA PARA TRATAR ESTA DELICADA MATERIA.
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Si bien el nombramiento de Contralor Interno es una de las escasas atribuciones del Consejo Superior que le permiten ejercer sus funciones de Control institucional, esta ha sido obstruida permanentemente durante cuatro años mediante dilaciones y dos concursos fallidos que ha llamado la autoridad superior, previa confección de las bases del Concurso y no aprobadas por el Consejo.
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De este modo, la autoridad superior ha podido dirigir la Universidad bajo el Control de un funcionario de su propia confianza, contradiciendo la lógica esencial de los estatutos universitarios.
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Esta situación de descontrol alcanzó su clímax durante la rectoría subrogante, lo que permitió realizar numerosos e importantes cambios en la institución al margen de todo control interno.
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Las escasas atribuciones del CS para superar esta situación de hecho sin producir una crisis institucional han permitido que esta situación absurda se haya prolongado tanto tiempo. Sin embargo, las dificultades institucionales que se avecinan en un corto plazo, en particular la eminente elección de rector a un año plazo, conjuntamente con la presentación de la UTEM a un nuevo proceso de Acreditación en condiciones más críticas, requiere con urgencia que esta situación se resuelva a la brevedad y sin nuevas dilaciones a fin de que el CS pueda funcionar mínimamente como corresponde.
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C. Vila C.
EDITOR
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